y entonces me dejo llevar.
tensión, calma, tensión... fusión, pulsión, pasión.
vibra cada una de mis células.
cierro los ojos. podría flotar. podría volar.
me dejo lamer por los sonidos, me entrego al ritmo, se desvanece mi pudor, me abandono al fluir, me sumerjo en la cadencia deliciosa, me fundo y me confundo; me estiro, me contraigo. no hay antes, no hay después, no hay más que este instante de armonía perfecta. hipnotizada, poseída. algo mío se disuelve, crece, se libera. soy arco, soy flecha, soy centro. soy onda, soy ola, soy viento. soy ritmo, soy espasmo, soy respiración.

no hay nada más, no hay nadie más.
sólo nosotros.
la música y yo.